¿Qué es la autoestima?
La autoestima es sin duda una de las más importantes formas en cómo nos relacionamos con nuestras experiencias vitales así como las pruebas de vida, dificultades y aprendizajes que se nos imponen en nuestra cotidianeidad. Y es que vernos funcionar, de un modo u otro, ante ciertas situaciones depende de esta palabra.
Y es que valorarse implica creer en sí mismo, permanecer en la incertidumbre y, pese a ella, creer en nuestra capacidad de poder sobre llevar el momento que estemos viviendo. La autoestima es clave en nuestro bienestar personal y en cómo somos capaces de experimentar plenamente la vida.
Otros términos como la confianza o la resiliencia están relacionados con el concepto de autoestima. La actitud de apertura hacia el aprendizaje que nos posibilita una sana autoestima en los momentos más dolorosos e incómodos nos permite alcanzar alternativas a solventar dicha situación. En cambio, peor autoestima se relaciona con una falta de seguridad o ansiedad ante situaciones que podríamos catalogar como estresantes y nuestro desempeño para conseguir un resultado deseado podría verse mermado.
Claves para tener una mejor autoestima
Existen claves para generar una mejor autoestima. Sin embargo, lo importante de estas claves son ‘’darse cuenta’’ de donde estás y , sobre todo, ponerse límites ante la exigencia de querer alcanzar ciertas tareas u objetivos. Sin más, algunas de esas recomendaciones podrían ser:
1. Fomentar el cuidado personal
Entender que el cuerpo, emociones y pensamientos están conectados. Cuidarse de forma integral es una de las maneras más efectivas para mejorar la autoestima. Puede darse el caso de hacer alguna rutina saludable como es algún tipo de ejercicio físico y estar presente en las emociones que nos pueden sobrepasar a veces, esto es, dejándonos experimentar y poner nombre, en la medida de lo posible, a lo que nos pasa.
2. Creencias limitadoras
La manera en cómo nos hablamos internamente y los mensajes que nos enviamos son imprescindibles en el impacto que nos generamos. Ejemplos como en vez de pensar que no puedes conseguir algo se puede cambiar o reformular con ciertas preguntas que nos lleven una versión interna más amable. Creer que no llego o no puedo habría que cuestionarse. Quizá podamos empezar con un ‘’¿y por qué no?’’.
3. Aceptación
Una palabra tan básica como compleja en sí misma. Reconocer que todos tenemos fortalezas y debilidades , que hay limites que nos pueden agotar o lo inevitable que suponen aquellos sucesos que dependen de otras personas o circunstancias de la vida. La aceptación nos hace mirar de manera responsable que hayamos podido equivocarnos o que no dependa en exclusiva aquello que estamos deseando de que se cumpla o no.
4. Protegerse y entender nuestros límites
Cuidarse a veces es decir ‘’no’’. No es repudiar o defenderse de algo o alguien solamente, es haber sostenido y aprendido desde algo que nos ha dolido y entender que algo debe tener otro rumbo distinto del que estamos viviendo.
5. Evaluar tu bienestar personal
Cuidarse implica pedir ayuda. Si ves que tu nivel de satisfacción personal no es el que quieres tener es el momento de implicarte hacia otra dirección.
En definitiva, aprender a querernos debería de ser una de las mayores prioridades que las personas debemos tener en cuenta.